La primera fiesta
El pasado sábado 8 de Junio estuve en mi primera fiesta en Alemania, para ser más exactos, en la ciudad de Geldern. Se trataba de un festival de música, llamado Strassenparty Geldern 2013, o lo que es lo mismo «Fiesta en la Calle de Geldern 2013». Una vez llegado al lugar, lo que me encontré fueron varias calles peatonales (dos) en cuyo recorrido había multitud de bares y restaurantes donde tomar algo (sobre todo vino y pizza) y también varios pequeños escenarios donde tocaban grupos de música de diferente género (Jazz, Rock, Soul, Pop, etc). El punto de unión de las dos calles mencionadas era una plaza bastante grande donde habían instalado un escenario mucho más grande que los anteriores y multitud de puestos de comida internacional.
El ambiente que me encontré la verdad es que superó mis expectativas, supongo que como una gran parte de los españoles, pensaba que a los alemanes solo les gusta ir de fiesta cuando salen fuera de su país, pero nada más alejado de la realidad. El festival estaba lleno de indígenas (y algún que otro foráneo como yo), disfrutando del ambiente, de la música y de los bares (como les gusta beber vino a estos alemanes…). Si tenéis la oportunidad de asistir a este festival en años venideros, os lo recomiendo, lo pasaréis bien.
Si la ciudad donde vivo ya está cerca de Holanda (mis compañeros de trabajo suelen bromear diciendo que soy Holandés), Geldern aún lo está más. Es un pueblo relativamente pequeño, tiene poco más de 33 mil habitantes, y como todas las ciudades y pueblos que he visitado en Alemania hasta ahora (tampoco han sido muchos), se ve bastante bonito y cuidado, con mucho mucho verde, como en todas partes por aquí.
Según la leyenda, sobre el año 878, dos nobles de la zona llamados Lord Wichard y Lupold de Pont encontraron un dragón debajo de un árbol de nísperos, y tras combatir duramente contra su terrible fuego, uno de ellos logró clavar su lanza en el vientre del dragón, el cual, tras sacudirse violentamente tres veces (haciendo que cayeran tres nísperos del árbol), murió a los pies de los valientes nobles. Para celebrar semejante hazaña, los nobles fundaron la ciudad de Geldern en aquel mismo lugar. En su escudo de armas (aquí todos los pueblos tienen uno), se puede observar al dragón y los tres nísperos para recordar aquel extraordinario momento (que no dudo ni un por un momento que ocurriera de verdad).
Otra curiosidad, esta ciudad estuvo bajo dominio español desde el año 1543 hasta el 1578, año en el que los holandeses lograron hacerse con ella, aunque la alegría no les duró mucho, ya que España volvió a recuperarla en el 1587 y la mantuvo hasta el 1703. Mas adelante también estuvo bajo control Francés, así que esta ciudad casi es más mía que de los alemanes. La próxima vez que vaya clavaré una bandera española en mitad de la plaza del pueblo.
Programa del Strassenparty Geldern 2013